Muchos nombres afroamericanos modernos presentan prefijos distintivos como ‘La-‘, ‘Da-‘, o ‘Re-‘ y sufijos como ‘-ique’, ‘-isha’, o ‘-aun’. Este estilo de nomenclatura surgió durante las décadas de 1960 y 1970 como parte del movimiento por el Poder Negro y el Afrocentrismo, representando orgullo cultural e identidad. Es una manera de crear identidades únicas mientras se rompe con las convenciones de nombres europeos tradicionales.