El convertidor utiliza algoritmos avanzados de procesamiento de lenguaje natural para transformar contenido generado por IA en texto similar al humano. Primero, analiza la estructura, tono y patrones del texto de entrada. Luego, aplica técnicas sofisticadas de reescritura para modificar estructuras de oraciones, reemplazar palabras por alternativas naturales y ajustar el flujo mientras preserva el significado original. El proceso mantiene la precisión del contenido al tiempo que lo hace sonar más conversacional y natural.