Cuando encuentres errores de traducción JSON, primero valida la estructura del archivo fuente utilizando un validador JSON. Revisa problemas comunes como comillas faltantes, caracteres de escape incorrectos, o objetos anidados rotos. La mayoría de los traductores JSON incluyen herramientas de validación incorporadas. Si los errores persisten, intenta exportar en un formato diferente o utiliza una herramienta de reparación JSON antes de volver a traducir. Considera dividir archivos más grandes en segmentos más pequeños para facilitar la solución de problemas.